Como hombre, y en verdad como persona, tienes que entender que el mundo es un mercado gigantesco al que te ofreces para una u otra cosa. Tú eres el producto en oferta en un macro-mercado de negocios, pareja, amistades…
De ti depende, en gran medida, quien “te compra” y quien no, todo según lo QUE ofrezcas y CÓMO lo ofrezcas.
EL QUÉ: El producto, es decir tú mismo
EL CÓMO: Marketing, cómo lo muestras y cómo lo “publicitas”
Entendiendo esto vamos a ver cómo deberías gestionar estas dos variables para optimizar tu vida sexual, romántica… y en general, social.
TÚ, EL PRODUCTO
La base de todo y lo que recomendamos desde Male Empire que sea el hincapié de tu vida. Eres tú.
Tú eres tú propio producto.
Un producto de calidad, con cualidades deseables y atractivo, siempre va a tener compradores, por muy mal marketing que tenga. La única excepción es su aislamiento absoluto y permanente como un ermitaño en su habitación.
Como el producto es lo más importante es donde debes centrar la mayoría de tus esfuerzos en optimizar y mejorar.
Tu valor no depende de lo que tú consideres importante, sino de lo que tus potenciales compradores deseen, o lo que la sociedad en general perciba como deseable. Por ejemplo, tú puedes percibir como perfecto pesar 20kg de puros huesos, porque entras por huecos que otros hombres no, pero la realidad es que la mayoría del mundo aprecia esta cualidad como algo bastante negativo.
Por tanto, para optimizar tu producto debes saber dos cosas:
- Qué es lo generalmente deseable.
- Qué es lo que el nicho al que quieres enfocarte percibe como deseable
Una vez hecho ese estudio, solamente tendrás que ir adquiriendo las habilidades, aptitudes o cualidades físicas que encajen con una o ambas categorías.
Hay ciertas variables físicas que son inmodificables o muy difícilmente alterables como puede ser la altura, la cara, el tamaño del miembro… por tanto debes aceptarlas y mantenerlas como constantes. El resto de los atributos deben ser perfeccionados poco a poco y año a año para conseguir acercarse lo más posible al ideal del mercado y de tu nicho concreto.
Evidentemente estas mejoras deben ser acordes a ti como hombre. Si el mundo desea a hombres que roban y esto no comulga con tus valores, tendrás que distanciarte del perfeccionamiento del arte del hurto.
Si tu producto es muy bueno, a poco que lo publicites; aunque tu estrategia de marketing sea mala, no tendrás problemas con mujeres ni hombres, en general.
Algunos de los rasgos que debes considerar mejorar si quieres un producto de valor son:
- El físico
- Tu estilo (barba, pelo, ropa, accesorios, perfumes…)
- Tu oratoria
- Tus dotes de liderazgo
- Tu “game”
- Tus ingresos y las habilidades que te generen los mismos
- Tu estatus
- Tu dominio del sexo
Es una lista abierta y mucho más amplia, pero aquí te dejamos algunos ejemplos para que sepas por dónde empezar. Evidentemente si tu nicho son las personas sordas, quizá no necesites mejorar tu oratoria. Estos son rasgos generales que varían según el nicho al que te quieras ofrecer de manera más especializada.
CÓMO TE MUESTRAS, MARKETING
Hoy en día, aunque el producto sigue siendo la base de todo, el marketing ha ido adquiriendo cada vez más y más importancia.
Si una persona muy atractiva y con muchas cualidades excelentes para el mercado, no se encuentra en ninguna red social, o sus redes sociales son nefastas, va a tener claros problemas para tener éxito en las interacciones sociales y en concreto con las mujeres.
La manera en la que te expones al mundo, y de alguna forma, cómo conoces a personas, juegan un papel muy importante.
Tener una cuenta de alto alcance en redes sociales, con un perfil bien diseñado, puede hacer que tu capacidad de hacer networking para negocios, o de ligar con mujeres se facilite a niveles extremos.
Si no posees presencia online solo te queda marketearte a la vieja usanza, saliendo a la calle, de fiesta…
En el tema mujeres tu única opción sería el “cold approach” o acercarte a mujeres por la calle en cualquier circunstancia para intercambiar unas palabras con la esperanza de poder llegar a más. Si solo te centras en esta modalidad y tu marketing sigue siendo muy anticuado, la cantidad y calidad de mujeres a las que optes se verán reducidas exponencialmente.
Además, la cantidad de tiempo que vas a tener que gastar en esta actividad es muy alta y probablemente te sea muy poco rentable; te quitaría demasiado tiempo, tiempo que podrías invertir tu mejora personal y disfrute de tus hobbies.
Es por esto que las redes sociales, sobre todo Instagram y Tinder, son tan importantes.
Si deseas optimizar al máximo tus experiencias, necesitas unos perfiles bien diseñados y pensados para facilitar los encuentros.
Te aseguro, por experiencia propia, que en Instagram muchas mujeres acaban haciendo el primer acercamiento si eres medianamente conocido, por eso puede ser tan interesante tener una marca personal algo desarrollada, además del estatus que te ofrece.
Cómo decides presentarte al mundo es crucial.
Puedes optar por una manera anticuada, que es meramente física, o elegir y construir una presencia online que te facilite todo.
Acerca de cómo crear las redes sociales para obtener resultados, de nuevo y tal como hemos explicado en el apartado anterior; depende del nicho, por tanto si quieres ayuda para ello, puedes reservar una mentoría con nosotros y te ayudaremos a configurar tus redes sociales.
CONCLUSIONES
El producto y cómo vendes ese producto son dos factores importantes en toda estrategia de venta, también en la tuya.
Aunque el producto es mucho más importante, dejar de lado el marketing puede reducir drásticamente tu éxito en tus relaciones sociales.
BUEN PRODUCTO + MAL MARKETING = RESULTADOS MEDIOCRES
MAL PRODUCTO + BUEN MARKETING = RESULTADOS POBRES
MAL PRODUCTO + MAL MARKETING = RESULTADOS NEFASTOS
BUEN PRODUCTO + BUEN MARKETING = RESULTADOS INCREÍBLES