Aunque pienses que no por el mal uso que hacen la mayoría de los hombres de esto; el sexo es una herramienta de control y poder desmesurado del hombre hacia la mujer. El sexo debe ser el premio de la mujer, no el tuyo como hombre. Un premio que tú decides cuándo entregar y cuando no.
Y sí, en la sociedad actual esto es al revés de forma generalizada. La mujer decide cuado se tienen relaciones y el hombre es el privilegiado cuando esto sucede, pero si le das la vuelta a la tortilla las mujeres estarán obsesionadas contigo.
Ya hemos tratado en Male Empire la importancia de la DISCIPLINA SEXUAL por la posición en la que te coloca, pero si combinas esta disciplina sexual con autocontrol prodigioso y un sexo de otro planeta, las mujeres van a derretirse por ti, vas a hacerlas adictas y dependientes a tu presencia.
En un mundo de hombres tan mediocres, desmarcarse en cualquier área es algo muy sencillo, pero más si cabe en el ámbito sexual.
Si escuchas a mujeres cercanas a ti, es una constante su insatisfacción sexual, se quejan ya no del tamaño del miembro de su pareja, sino de su destreza con él y con otras herramientas como los dedos o la lengua. Es obvio por esto que, si destacas, por poco que sea, vas a conseguir tener un impacto muy profundo en cualquier mujer.
Incluso las mujeres más promiscuas y experimentadas tienen pocos o ningún encuentro sexual destacable.
Conviértete en el hombre que las hace ascender al Olimpo del placer y tendrás un lugar seguro en su corazón y su mente, puede que para siempre. Conseguirás que siempre que esté con otro hombre, piense en que tú, se lo hacías mejor.
Destacar en la cama
Las mujeres aman el sexo igual o más que los hombres, pero les importa mucho más la calidad que la frecuencia. Un hombre promedio, incluso si tiene sexo mediocre o malo, querría repetir; una mujer si no es satisfecha como Dios manda, no la importa lo más mínimo no repetir.
Prefiere no hacerlo a hacerlo a medias o mal.
Para destacar en la cama necesitas partir de una premisa fundamental: CREAR CONFIANZA EN LA MUJER. Las mujeres son tremendamente inseguras, sobre todo con su apariencia y si no se sienten cómodas, por muy bueno que seas en la cama, ella estará en su cabeza, pensando en que la estás juzgando, que estás pensando que no es atractiva…y cuando alguien se encuentra más en su cabeza que en el momento presente no puede disfrutar.
Es tu cometido hacerla sentir cómoda, y eso se consigue desde el minuto uno de la cita, no sintiéndote cohibido a hablar de sexo si surge el tema, no juzgándola cuando hable y dando cumplidos estratégicos pero limitados acerca de su apariencia, cumplidos que deberán incrementar su frecuencia a medida que el terreno de la cama se ve más obvio y cercano, y deben ser constantes cuando estes en los besos previos, mientras se quita la ropa… Esto es importante porque la hará sentirse una diosa e irá eliminando esa barrera mental que tiene de auto juzgarse y montarse películas en su cabeza y que la impide entregarse al placer.
Una vez ella se siente cómoda, es cuando entra en juego tu destreza y habilidad, que empiezan lejos del miembro viril.
Tus besos y tus caricias son la primera parte y la más importante de toda la interacción, tanto que pueden marcar el resultado del encuentro. Actuar bien en este momento tan temprano es crucial, es donde la mayor parte de los hombres falla, acelerándose, y como consecuencia de ello, resultando en una experiencia de 5 y no de 10 para la mujer. La mujer se estimula sexualmente de forma mental, debes despertar ese deseo antes de nada.
Tómate tu tiempo, no vayas rápido por muy caliente que estes, deja que sufra de deseo, que te ruegue, que se encienda hasta prender el control sin necesidad de estimular sus genitales.
Una vez llevas un tiempo prudencial, ni muy largo ni muy corto, y cuando notes su respiración más agitada o incluso que empieza a gimotear, empieza la segunda parte, los preliminares.
No entraré en detalle porque no es un artículo para enseñarte a hacer magia con herramientas como los dedos y la lengua, pero empieza por ahí, hazle morir sin que tu pene entre en el terreno de juego.
Y cuando ella misma este tiritando de placer, te esté verbalizando su deseo de tenerte dentro, sólo entonces, esperas un poco más y cuando tú decidas, empieza la acción real.
Probablemente si has sido bueno en el proceso previo, la parte de la penetración; aunque imprescindible, juegue un papel secundario y ya te la hayas ganado y te hayas colocado como uno de sus mejores encuentros, aun así esfuérzate en hacer que le tiemblen las piernas.
Por qué el sexo juega un papel tan importante en la memoria de una mujer
En primer lugar, como ya hemos dicho, por la escasez. Si una mujer está acostumbrada a que se lo hagan mal o de forma mediocre, cuando recibe la agradable sorpresa de tener en frente a un artista, va a querer mantenerlo durante mucho tiempo. Su cabeza no podrá olvidar lo que la hiciste, como se lo hiciste y lo loca que se volvió. Se preguntará cómo pudo perder el control de esa forma y querrá repetir una experiencia que quizás no ha vivido ninguna vez más en su vida.
También, la entrega sexual de una mujer es algo muy distinto a lo que puede suponer este mismo hecho en un hombre. Se ha vuelto vulnerable para ti y por tanto ese mero hecho ya hará que tengas un espacio especial en su cabeza (a no ser que te encuentres con una adicta al sexo que lo practica con un ser distinto cada día, cosa poco común peor cada vez más frecuenta en esta sociedad), y si a eso le unes una experiencia inolvidable donde ha sido dominada y guiada a un placer antes inimaginable… querrá repetir. No lo dudes.
Si en el primer o segundo encuentro íntimo has conseguido que se sienta plenamente cómoda, es ahí donde ella va a poder ser todo lo extravagante que desee con sus deseos. Y te aseguro que si consigues que una mujer se abra al 100% contigo vas a quedarte asombrado de lo que realmente desean y quieren probar.
En general, la escasez de buen sexo, unido al componente emocional del mismo (mucho más evidente en la mente femenina), hará que te coloque como su salvador.
Si consigues hacer que una mujer experimente cosas en la cama que nunca antes ha podido experimentar podrás hacer que se acuerde de ti, incluso cuando este casada y con hijos.
Es algo que no podrá evitar recordar, el poder que posees como hombre a este respecto es incalculable y por muy pocos conocido, esfuérzate en usarlo adecuadamente y con mujeres selectamente elegidas, crear dependencia sexual con una mujer inestable o muy tóxica puede generar más problemas de los que te gustaría imaginar.
¿Debes centrarte en su placer o en el tuyo?
Desde Male Empire recomendamos que al menos en los primeros encuentros, entre los dos a cinco primeros, ella sea la prioridad. Haz que siempre quiera más de ti, ponte en segundo lugar y no te sientas satisfecho hasta que ella este moribunda y jadeando.
Tómatelo como una inversión. Si dejas tu placer de lado durante ciertos encuentros el poder que tendrás sobre esa mujer y las posibilidades de sexo ilimitado con ella son mucho mayores.
El problema de los hombres es que piensan solamente en llegar al orgasmo y después se duermen, generando una frustración obvia en la mujer. Esto es algo que podrás hacer una vez ella sepa que eres capaz de hacer lo que quieras con ella, llevarla al cielo y bajarla a tu antojo.
Las primeras veces ella es la absoluta prioridad, no hay discusión.
¿Cómo aprendo sobre esto?
En primer lugar entendiendo, entre otras cosas, que el orgasmo de la mujer empieza en la mente. Por eso es necesario que le des confianza y la estimules tanto, que su cabeza desconecte y se deje llevar a donde tú quieras.
Además de esto debes estudiar, al menos por encima, cómo funciona la vagina femenina, dónde está el clítoris y alguna técnica básica.
Pero sobre todo… practicando, ya sabes “la práctica hace al maestro”.
El problema está en que cada mujer es un mundo, por tanto, los primeros encuentros necesitas ser un científico. Analizar la respiración de la susodicha para saber qué la estimula más y que la excita menos, dejarte guiar por sus movimientos y sus sonidos, por sus indicadores no verbales de placer.
Pero en general si entiendes a una mujer entiendes básicamente a todas. Eso sí, cada una necesita su adecuada masterización y tratamiento personalizado, lo que te ha funcionado en una puede conseguir un efecto poco deseable en otra.
Por mucho que leas y sepas la teoría, hasta que no la pongas en práctica con varias mujeres no sabrás si realmente la entiendes y sabes llevarla a cabo.
No te frustres si no consigues dominarlo al principio y tienes muchos encuentros fallidos, esto es un proceso lento y no requiere que te exijas en exceso. Es normal fallar al principio, tiempo al tiempo.
Conclusión
El sexo es un arma a tu favor, un arma de doble filo; bien usada te convierte en «EL» hombre, mal usada te deja fuera de la ecuación.
No darle la importancia que tiene al sexo y pensar que es suficiente con lo que sabes es una negligencia que no te puedes permitir. Ser un HOMBRE 360 supone ser el pack completo. No queremos solo ser buenos en nuestra apariencia, recursos económicos o labia por separado, queremos todo a la vez y trabajamos de forma activa para conseguirlo.
O la mujer te controla en base al sexo, o tu la dominas como consecuencia de este. Está en tus manos, como casi todo en esta vida si eres un hombre.